En Movistar creemos que las palabras tienen un poder transformador. Por eso, en colaboración con la Fundación Ayúdame a Vivir y la organización ConTextos, llevamos a cabo una mañana muy especial en el centro médico de la fundación. Nuestro objetivo: conectar con los niños y niñas a través de la lectura, la imaginación y los sueños, con la participación de nuestros Voluntarios Movistar.
La experiencia comenzó con un ambiente lleno de expectativa y sonrisas. Los niños estaban ansiosos por descubrir las historias que les esperaban. Con un libro en mano y mucha emoción, Daniela Raffo, representante de ConTextos, comenzó a narrar la aventura de Sergio, un pingüino con un sueño muy especial: jugar bien al fútbol.
A través de las páginas de este cuento, los niños se sumergieron en un viaje de creatividad y aprendizajes. Sergio les mostró que los sueños se alcanzan con perseverancia, trabajo en equipo y el apoyo de quienes te rodean. La historia de este simpático pingüino resonó en los corazones de los pequeños, quienes, entre risas y aplausos, compartieron cómo también sueñan con alcanzar grandes metas.
Además de despertar su imaginación, esta actividad tuvo un propósito más profundo: recordarles que no están solos. No solo leímos un cuento, sino que conectamos con cada niño a través de gestos de cariño, palabras de aliento y momentos de complicidad que dejaron huellas en sus corazones.
El éxito de esta actividad fue posible gracias a ConTextos, una organización comprometida con el poder transformador de las historias, y al entusiasmo de nuestro equipo de voluntarios. Este encuentro no solo iluminó la mañana de los niños, sino que también dejó una lección para todos: la lectura es un puente que conecta, inspira y transforma vidas.
Movistar y varios de sus colaboradores también son parte del Movimiento Amarillo, una iniciativa que une esfuerzos para apoyar a la Fundación Ayúdame a Vivir. Como parte de este compromiso, Movistar ofrece un descuento del 20% en planes pospago a quienes formen parte de este programa. Además, recientemente 123 colaboradores decidieron sumarse donando parte de su salario para contribuir directamente al tratamiento y bienestar de los niños atendidos por la fundación. Este espíritu solidario es parte de nuestro ADN, y nos llena de orgullo ver cómo nuestras acciones tienen un impacto positivo en tantas vidas.
En Movistar, reafirmamos nuestro compromiso con la comunidad y la construcción de un mundo más humano. Porque juntos, conectamos más que palabras: conectamos sueños, creatividad y esperanza.
